miércoles, 10 de diciembre de 2014

69 - LA MISA NEGRA


¡Ay, qué equivocado estás! La cruz, el pentáculo... todo está en la posición incorrecta, y tú te dejas engañar. ¿Por qué? Quizá porque has perdido el rumbo y crees que adhiriéndote a cualquier ritual, ideología, forma de pensamiento o institución, lograrás encontrar la verdad; pero nada más alejado de ella que equivocar el ídolo al que te estás entregando.

Te han permitido que inicies el camino sólo para que te des cuenta de lo equivocadísimo que estás; pues al honrar al ídolo erroneo, estás entregando tu alma, tu personalidad que se hará dependiente y sumisa a una idea en la que se embarcó y que a su debido momento pedirá su recompensa.

Vete antes de que sea demasiado tarde. Ya los has comprendido. Te sentías tan vacío que fue fácil reclutarte, pero ahora has abierto los ojos y ves que, además de estar todo del revés, el precio será muy elevado si persistes en este grave error.