miércoles, 29 de junio de 2011

XII - EL COLGADO

EL COLGADO es la carta número XII de los Arcanos Mayores en el Rider Waite.

Como podemos ver, se nos muestra una figura colgada boca abajo en la rama de un árbol. Sus manos parecen atadas, su cabeza está rodeada de un halo dorado; y en cuanto a sus piernas están cruzadas de igual forma que la figura de EL EMPERADOR, en la carta IV, pero en esta ocasión, además de estar boca abajo, una está atada al árbol y la otra parece suelta en una espera tranquila a que los acontecimientos se desarrollen.

Aunque la carta en principio pudiera parecer no demasiado tranquilizadora, cuando nos fijamos en el aspecto de la figura no acabamos de intuir que se encuentre preocupada. Sencillamente se trata de alguien que entiende que para obtener algo en la vida también hay que saber sacrificarse, además de dar tiempo a las circunstancias.
En una lectura nos suele hablar de una cierta postergación de aquello que deseamos. Algo parece bloqueado y lo mejor que podemos hacer es tomárnoslo con filosofía y permitir que esta experiencia nos ayude a crecer interiormente. No olvidemos la luz dorada que rodea el rostro de nuestro personaje; la claridad de la mente y del espíritu así como de la intuición.

Ante los obstáculos o demoras con los que nos vamos encontrando en la vida, no hay que desesperarse sino que sencillamente hay que saber aguantarlos. Ése es, a mi juicio, el mensaje principal de esta carta.

sábado, 25 de junio de 2011

14 - LAS DOS CARAS DE EVA

Las Dos Caras de Eva es una carta que nos habla del conflicto que surge al no saber conciliar los diferentes papeles que asumimos en la vida.

Observemos bien el diseño. Una mujer se mira ante un espejo, pero ¿qué es lo que ve? Parece que ninguno de los reflejos nos muestra a la mujer que vemos de espaldas, ya que el vestido difiere en las dos imágenes reflejadas ante ella. ¿Por cuál de estas imágenes optará? Y lo más importante: ¿debe optar por alguna en concreto o asumir la duplicidad de papeles?

En un extremo del espejo vemos a una madre amamantando a su hijo; mientras que en el otro lado, aparece una mujer muy bien arreglada, incluso luce una corona y unos pendientes que no aparecen en su compañera; diríamos que se trata de una mujer muy sensual. Si nos fijamos en la cómoda, en el lado de la madre están desparramados unos juguetes, mientras que en el de la mujer sensual aprecen una hermosa rosa y olorosos perfumes.

Sí, una mujer tiene que asumir estos dos aspectos, pero no siempre sabrá reconciliarlos. Por una parte es la ternura personificada, y por otra es la pasión y la elegancia. No sólo se trata de que sea madre de un  hijo real, sino de que en muchas ocasiones asume ese comportamiento, ya sea con su marido, con los amigos, con los familiares e incluso con los desconocidos; el papel de madre nutricia que ampara, cuida y alimenta. Pero también está ahí dentro del mismo personaje la mujer que disfruta con la belleza, con el erotismo, con la sensualidad, con el placer.

Si eres hombre, no creas que esta carta no se refiere también a ti. Aunque las cartas del Symbolon utilicen arquetipos, pueden estar dirigidas a cualquiera de ambos sexos. Un hombre también puede ser un padre tierno y protector, o un galante seductor.

Pero, la carta advierte de varias cosas, dependiendo de la posición en la que aparezca. Puede señalar que se está priorizando un papel por encima del otro, y que no hay que descuidar que en la vida ambos son importantes. Puede indicar que la persona que se enfrenta a esta carta, tiene muchas dificultadas para conciliar ambos aspectos. Y puede indicar que lo que hay que hacer es aceptar esta duplicidad de papeles y llevarlo lo mejor posible. ¿Por qué no ser una madre y adornar el mundo también con la sensualidad y el sentido de la belleza?

domingo, 19 de junio de 2011

OROS - BREVE RESUMEN DE SUS SIGNIFICADOS


Los Oros representen el elemento tierra; lo pragmático, la posibilidad material de creación.

AS DE OROS – La gran oportunidad de que, poniendo el trabajo y el tesón necesarios, las cosas se desarrollen como deseamos. Digamos que responde mucho a esa historia que nos habla de quien se queja porque nunca le toca la lotería y Dios le dice que lo que tiene que hacer en primer lugar es comprar el billete para que pueda resultar premiado.

DOS DE OROS – La diplomacia, la negociación. Es una persona que sabe negociar bien las situaciones y dar un ten con ten cuando se hace preciso. Se trata de alguien que en vez de enfrentarse a los elementos contra corriente, sabe situarse a su favor.

TRES DE OROS – La maestria y la obtención de algo permanente en unión con un equipo. No se trata de la persona aislada sino de alguien que consigue sus objetivos dentro de un equipo. Puede ser alguien que consigue ganar una oposición, o cualquier tipo de situación estable para la que se ha preparado con gran éxito.

CUATRO DE OROS – El ahorro. Se trata de alguien a quien no le gustan los cambios y trata de retener lo ya obtenido, sin darse cuenta de que, a veces, el hecho de retener impide el crecimiento. Es verdad que el ahorro es bueno en ocasiones, pero también lo es que hay que confiar en el flujo de la vida y no cortarlo porque si no los éxitos obtenidos en vez de producir más se agostan.

CINCO DE OROS – El sentimiento de exclusión, de pérdida. Quien obtiene esta carta se siente rechazado y no sabe mirar a quien de verdad lo acoge.

SEIS DE OROS – El apoyo, la generosidad. Esta carta nos habla de retribuciones; a veces pedimos, a veces damos, pero lo cierto es que en una o en otra situación estamos recibiendo algo.

SIETE DE OROS –
La espera productiva. Uno ha sembrado y ahora es el momento de esperar pacientemente los resultados.

OCHO DE OROS – Alguien que se dedica concienzudamente a una tarea. Puede que no la haga de forma rápida, pero poco a poco va progresando en sus resultados.

NUEVE DE OROS – La persona que se siente complacida y orgullosa de sus logros, que, podría decirse, los ha conseguido por ella misma. Sabe disfrutar con elegancia de la belleza que la vida le depara, y sabe ser fuerte e incluso sacrificarse en aras de un bien mayor. Si tiene que esperar, lo hace, pero no se vende a otras ideas que no comparta.

DIEZ DE OROS – Como en el diez de copas, aquí es la felicidad lo que nos rodea. Una felicidad quizá más centrada en el orden establecido, en el terreno económico y social, más que en el sentimental. Se alcanza una situación en la que todo parece estar donde debería.

PAJE DE OROS – Una oportunidad para que las ideas se conviertan en logros está apareciendo ante el consultante.

CABALLERO DE OROS – Se trata de la persona que obtiene frutos gracias a su persistencia y tesón, a no adelantarse, a ir dando los pasos adecuados y seguros. El peligro es cuando tanta búsqueda de suelo firme donde pisar le impide a veces actuar más enérgicamente. Quien monta este caballo es alguien que busca solidez, pero a veces las orejeras que le ha puesto a su montura pueden entorpecerle el camino. Incluso podría correr el peligo de convertirse en alguien excesivamente testaduro, con una falta de flexibilidad para cambiar de rumbo si eso se hiciera necesario.

REINA DE OROS – La mujer capaz de realizar y hacer material y efectivo aquello que se proponga.

REY DE OROS – Es una persona que sabe ver las oportunidades y manejarlas. Tiene una gran capacidad resolutoria y poder adquisitivo y la sabiduría para conseguirlo.

jueves, 16 de junio de 2011

XI - EL AVANCE

EL AVANCE es la carta número XI Tarot Zen de Osho.

Vemos a un joven que, con una fuerza arrolladora, destruye los muros que lo mantenían oprimido. De su plexo solar surge una poderosa luz. Ha logrado vencer su ira, y su desbloqueo no obedece a la violencia ciega sino a un profundo despertar.

La carta nos puede enseñar cómo los bloqueos, las ataduras, se superan aplicando la consciencia serena y franca; no con engaños ni revanchas ciegas.

Y, por supuesto, una vez descubierto el problema, se necesita dar el paso adelante que nos lleve a la acción. Ha llegado el momento de avanzar lúcidamente.

domingo, 12 de junio de 2011

Predicciones nocivas

A la hora de atender determinadas consultas de Tarot, parecen existir dos tipos de prejuicios que pueden dificultar mucho la ayuda que el Tarot nos brinda.

Uno de esos prejuicios es considerar como predicción fija e inamovible lo que debería verse como un punto importante para reflexionar sobre posibles peligros que una situación, si no se encara de la manera adecuada, puede ocasionar. Por ejemplo, muchos tarotistas se lanzan a predecir como algo inapelable un divorcio; mientras que quienes hablan a través de las Cartas lo que están haciendo es señalar la posibilidad de que éste se lleve a cabo, y por tanto la necesidad de reflexionar si uno lo desea o no, y poner los medios para su superación.

Otro de los prejuicios es la consideración de que determinadas circunstancias negativas en nuestra vida estén sucediendo porque seamos o no víctimas de un maleficio o bien un "mal de ojo" de alguien que no nos quiere demasiado bien.

Pongo ante vosotros este texto extraído del libro Tarot y Constelaciones Familiares, de Daniel Rodés y Encarna Sánchez, en el que se aborda esta temática que, aunque en el libro vaya dirigido a la influencia generacional, creo que puede aplicarse también a la individual. Os invito a su lectura:

¿Qué ocurre con las maldiciones?
Cuando alguien pronuncia una maldición y ésta es asumida, se convierte en un patrón mental para las generaciones siguientes. Las maldiciones existen, pero no como una misteriosa energía que pulula por el ambiente, sino como órdenes asimiladas por el inconsciente.
Las sentencias o maldiciones son órdenes a cumplir en el futuro. Todas las magias y supersticio­nes del mundo se basan en este principio. Cuando la persona recibe la maldición y se la cree, le da poder. Por eso a las personas escépticas estas maldiciones no pueden hacerle daño. Al ser creacio­nes de la propia mente, hace falta una mente predispuesta a crearlas. Por ejemplo, cuando un mago vudú quiere hacer daño a una persona y clava alfileres en un muñeco, la víctima debe ser informada de ello. De lo contrario, no se produce ningún efecto.
Muchas personas que se dedican al Tarot sin la suficiente comprensión o preparación moral sue­len dictar sentencias como: «Te va a pasar esto». Es una grave irresponsabilidad, pues hay presuntos tarotistas que se dedican a vaticinar graves enfermedades, accidentes e incluso muertes. El peligro estriba, como ya se ha dicho, en que si alguien se lo cree su mente puede atraer esos peligros a su vida. El Tarot no fue creado para esa clase de adivinaciones fraudulentas, sino como un medio para conocernos mejor y descubrir nuestras diferentes facetas psicológicas y espirituales. Cuando traba­jamos en nuestro árbol genealógico, a veces surgen estas sentencias o maldiciones que pueden mar­car a toda una familia. El mayor perjuicio se produce cuando son maldiciones generales: se maldice a todos los hombres, todas las mujeres, todas las personas de un pueblo o un país, etc.
Daniel Rodés y Encarna Sánchez,
Editorial Océano

A veces me da mucha pena cuando veo que algunos tarotistas -como muy bien señalan los autores de este libro- reafirman los miedos de los consultantes, en vez de darles el justo valor y ayudar a la persona en su maduración en vez de crearles más miedos que les hagan dependientes.

Sí quiero señalar otra cosa muy distinta, y es el tema de la influencia que puedan desarrollar la fuerza de nuestros pensamientos. Y entonces sí, quizá deberíamos aprender y disciplinarnos en su control, en lugar de permitir que los malos pensamientos y sus influencias negativas sean más fuertes que los buenos... ¡que también los tenemos! Pero esto, quizá, deba de ser tratado en otro artículo más adelante.


jueves, 9 de junio de 2011

13 - EL DESAFIANTE

¿Qué tenemos aquí? ¿Un niño enfadado? ¿Puedes reconocerte en él? En la carta de El Symbolón conocida como, EL DESFIANTE, EL TERCO, o EL QUE SE OPONE, podemos ver muchas cosas.

El niño se ha enfadado; rompe sus juguetes, los tira en actitud violenta y se marcha dando un portazo, mientras la madre, con sus brazos en jarra, espera su regreso. ¡Ya se le pasará! Y si no... ¡peor para él!

Los nubarrones en el cielo adornan este decorado dramático. Sí, la vida a veces no está por la labor de concedernos todos los caprichos que le pedimos, y por más malas caras que pongamos, no va a cambiar de opinión si ve que no resulta conveniente. Pero el niño no se detiene a pensar en lo que es o no conveniente sino sencillamente en lo que desea él en el momento preciso que lo pide.

Además, el niño, ante la negativa de la madre a ceder a sus requerimientos (puedes leer Vida, en lugar de "madre"), se siente dolido y falto de amor; piensa erróneamente que sus seres queridos le han abandonado al no ceñirse a sus demandas. Se ve solo, injustamente tratado, y ante la impotencia que siente sólo ve una salida: el enfado, el berrinche, la huida ruidosa para obligar a los demás a reaccionar; pues no hay que en gañarse, nuestro pequeño heroe no busca en absoluto abandonar el escenario, sino que sólo lo simula para provocar una reacción más acorde con sus deseos. Pero ¿conseguirá que los demás se pliegen por fin a sus demandas? A lo mejor resultaría más conveniente que este pequeñín enfurruñado que todos llevamos dentro cuando se nos impide la realización de nuestros deseos se parase a considerar en la conveniencia de los mismos. 

El muchacho tendrá que terminar por reconocer que la Vida es mucho más sabia que él, y que muy probablemente este enfado permita, con el tiempo, que nuestro pequeñín  se haga adulto de una vez.


domingo, 5 de junio de 2011

XI - LA JUSTICIA


La Carta número XI en el Tarot Rider Waite es LA JUSTICIA. Vemos a una mujer serena y majestuosamene sentada sobre un trono flanqueado por dos columnas. Dos columnas; para mí eso nos habla de equilibrio.

La mujer ostenta una corona, con una piedra preciosa justo en el centro. Me parece, por tanto, estar viendo el "tercer ojo". Por supuesto, la Justicia tiene que saber utilizarlo para obtener el conocimiento necesario a la hora de contemplar las causas y sus efectos; porque de eso nos habla LA JUSTICIA: de causas y efectos.

En su mano izquierda sostiene una balanza que intenta equilibrar. Y en su mano derecha alza una espada: la rectitud, la decisión tras un análisis detenido y pausado.

La carta de LA JUSTICIA nos habla de que todo efecto tiene una causa, y que, por tanto, debemos considerar muy bien lo que hacemos ya que tendrá consecuencias.

LA JUSTICIA es noble y transmite serenidad, equilibrio y decisión.

Aquí la vemos ataviada con una túnica roja. Sin embargo, a mí me gusta verla vestida del color rosa. ¿Por qué? Porque el rosa es el color del amor; y LA JUSTICIA no puede ser "justiciera", sino "justa" que es muy distinto. LA JUSTICIA no puede actuar sin amor, porque de otro modo ¿dónde estaría nuestra salvación?