jueves, 17 de junio de 2010

Seis de Bastos y Seis de Espadas en el Tarot Rider Waite: Meditando con las Cartas del Tarot

Seis de Bastos, el triunfo, la victoria, el reconocimiento de méritos.... En fin, en un primer momento todo es positivo en esta carta del Rider Waite, pero... ¿es realmente así? No podemos olvidar que las cartas del Tarot, como mínimo, tienen una doble visión; no se trata de adjudicar a unas un aspecto negativo y a otras uno positivo, sino ver los dos lados y ayudar a centrarnos en el tema que queramos tratar.

El Seis de Bastos nos muestra a alguien que se presenta victorioso sobre una caballo y coronado con una diadema de laureles. Por si cabía alguna duda, ahí está un público enfervorecido que levanta ramas en honor de nuestro personaje. Sí, por supuesto, nos puede hablar de la victoria obtenida tras un árduo trabajo. Pero como digo, las cartas tienen una doble visión que no debemos desechar sino aprender de la misma. En este caso, a veces sucede que cuando uno alcanza el reconocimiento, corre el riesgo de caer en un exceso de vanidad, y, por tanto, en un alejamiento peligroso de la realidad.

A veces, cuando nuestra miranda se va ampliando por todos los dibujos de la carta, se fija en detalles que en apariencia pasan desapercibidos pero que, en determinadas lecturas, destacan y uno no sabe muy bien por qué. Así que, lo mejor es detenerse y valorar esos detalles en profundidad. Así, por ejemplo, podemos detenernos en el rostro de uno de los personajes que han acudido a aclamar al protagonista de la carta; y entonces nos encontramos con la sorpresa de que ese rostro no refleja alegría ni entusiasmo, sino que, por el contrario, muestra un cierto enfado. ¿Por qué? ¿Porque piensa que él merece más esos reconocimientos que la figura montada a caballo? Podría ser, ¡porqué no! Así que, es bueno tener en cuenta que cuando se consigue una victoria, esa victoria hecha pública puede conllevar algunos puntos negativos. En concreto, aquí hemos desarrolado dos; por una parte, podría salir a la luz un exceso de vanidad y prepotencia por quien ha conseguido la victoria; y, por otra, la envidia que podría suscitar en otros.

Hay que aprender a aceptar la victoria de forma serena y sencilla, y comprender lo que puede acarrear para poner remedio antes de que se exageren las conductas de unos y de otros.

El Seis de Espadas, como casi todas las cartas del Tarot, nos puede hablar de muchas cosas y no sólo de una. ¿Qué te sugiere a ti en este momento?

La imagen nos muestra a unos personajes en una barca orientándose hacia nuevos rumbos. ¿Lanzarte a nuevas aventuras te seduce o te cohibe? A veces, la persona se lanza en busca de nuevos territorios por el placer de recorrer esas nuevas oportunidades que pueden estar ofreciéndose; pero también es cierto que, en ocasiones, quien se ve obligado a embarcarse y buscar otros rumbos lo hace porque el lugar donde se asentaba ha variado y obliga a nuevas acciones sean éstas deseadas o no.

La vida es movimiento. La pena de lo que tiene que ser abandonado, aunque sea por un periodo corto de tiempo, es lógica y humana. Pero no es bueno enfrentarse a las nuevas experiencias cabizbajos y tambaleantes, sino fuertes y animosos, como el barquero que mira hacia el nuevo horizonte.