lunes, 6 de abril de 2009

Ases en el Tarot Zen de Osho.- Meditando con las Cartas del Tarot

Como ya vimos anteriormente, en el Tarot Zen de Osho, los Arcanos Menores reciben unos nombres distintos y, según mi modo de ver estas cartas, considero que su significado suele ser expresado en una línea más espiritual, y, por tanto, más abstracta que la mostrada en otros Tarots. Vamos a ver más detenidamente los Ases.


Empezamos por el As del Arco Iris (Oros en el Tarot tradicional); es decir, empezamos por el palo que Osho asigna a lo FÍSICO, y encontramos la carta llamada PLENITUD.

Vemos una figura rodeada de flores; pero no sólo eso, en su interior también las lleva.

La Carta nos recuerda que no podemos estar vacíos; incluso, aunque en algún momento nuestro entorno nos pueda parecer desierto, nunca debemos olvidar las flores que llevamos dentro.
Nos habla de una persona que es en sí misma fruto. Nos habla de alguien que tiene en sí misma la capacidad de regeneración. Vaya donde vaya, lleva la semilla de la fructificación dentro, ¿qué ha de temer, entonces? Su vida genera vida y éxito; nada ni nadie puede eliminar la semilla de la vida que fructifica.

El As del Fuego, de la ACCIÓN, de la Energía (As de Bastos en el Tarot tradicional), nos lleva al interior de cada uno, y, ¿qué hay allí? Nuestra esencia, la semilla de nuestro Creador.

Esta carta nos está dirigiendo hacia la fuerza que habita en nuestro interior; nos dice que es hora de ponerla en marcha. En vez de fijarnos en lo que nos rodea, deberíamos más bien focalizarnos en nuestra propia fuerza. ¿Dónde vas a encontrar mejor ayuda que en tu propio centro interior?

Además, nos pide que nos centremos equilibrando nuestra razón y nuestro corazón. No se trata de que desplacemos la fuerza de la mente al corazón o viceversa, sino que sepamos estar equilibrados para que ésta no se disipe por uno u otro de los lados, sino que, de manera unificada, la energía se concentre en el punto medio de la existencia.


El As de Nubes, hace referencia a la MENTE, y recibe el nombre de CONSCIENCIA. (En el Tarot tradicional estaríamos hablando del As de Espadas).
La mente ha de estar serena y abierta para obtener claridad. Nuevamente se trata de una carta que nos pide centrarnos en vez de dispersarnos; centrarnos para poder analizar, libres de prejuicios y preocupaciones, y poder ir al verdadero fondo de cualquier cuestión que se nos plantee.

La Carta nos mueve a una actitud serena a la hora de ponerse a meditar, a pensar, a desarrollar ese "tercer ojo" situado en el entrecejo que nos permitirá ver la realidad.

El As del Agua, el de las Emociones (As de Copas en el Tarot tradicional), se titula FLUIR. Podemos ver a una figura que se desplaza tranquilamente por el agua. No va contra la corriente sino que permite que la marea la mueva sin oponer la persona resistencias.

¿Cuántas veces te niegas al amor? ¿Cuántos obstáculos pones a la hora de dar y recibir expresiones de afecto? ¿Por qué fuerzas tanto tu corazón?
El agua sabe cómo manejarse; no temas zambullirte en ella pues ya sabemos que las emociones son agua que debe ser liberada y nunca estancada. Se trata del agua en su naturaleza esencial, por tanto, ni sobreactuará ni se estancará si tú permites que fluya libremente. Los excesos no son la verdadera naturaleza de las emociones, sino que surgen por intentar controlarlos sin confiar en los verdaderos sentimientos.

Confía en el proceso de la vida; si somos hechos de amor, ¿por qué temer tanto a la propia naturaleza?