domingo, 8 de mayo de 2011

La Cruz Celta

La Cruz Celta es una de las tiradas más conocidas del Tarot. A mí me gusta utilizarla especialmente para obtener una visión general del consultante y su situación actual.

No todos los tarotistas dan el mismo significado a las diferentes posiciones, ni las coloca en el mismo orden, pero más o menos se rigen por un fondo común. Aquí voy a explicar la tirada tal y como yo la suelo entender. Aunque las cartas se coloquen en el orden que viene indicado, a la hora de la lectura, no lo sigo, sino el que explico más adelante, para poder obtener una visión más estructurada; así, por ejemplo suelo leer unidas las posiciones 4 y 6, y luego la 3 y la 5.

Posición 1: Aquí suele aparecer el problema para ser tratado. Si no se hace una pregunta, aclara qué es lo que preocupa el consultante; y en el caso de que se haga la pregunta, nos confirma ésta o bien nos explica que es otro el tema más importante que debe ser valorado.

Posición 2: Se trata de una carta que cruza la anterior y que bien añade más información sobre el asunto, o bien nos dice lo que se opone a esta cuestión.

Posición 4: Nos habla del pasado reciente. Lo que acaba casi de suceder, o lo que afecta de un pasado a la cuestión actual.

Posición 6: Los posibles resultados después de ese pasado que acabamos de valorar. Como siempre, cuando se habla del futuro próximo, se está hablando de una alta probabilidad de que esto acaezca, si nada cambia, o el consultante no realiza otras acciones que puedan modificar este posible resultado. Nos advierte de aquello a lo que en principio podrían dirigirse las cosas, a no ser que algo las cambie totalmente. Se muestra un camino para tenerlo en cuenta y poner los medios para su consecución o su cancelación.

Posición 3: Lo que mueve internamente al consultante en esta situación.

Posición 5: Lo que podría resultar externamente de esta situación.

Posición 7: Representa al consultante.

Posición 8: Habla del entorno.

Posición 9: Un punto de vista que debería valorar bien como consejo para actuar o bien como carta que avisa de aquello que el consultante teme o hace mal. Es decir, se trata de bien un consejo que se debe seguir, o bien de una puntualización sobre lo que no se hace bien.

Posición 10: A la vista de cómo están las cosas, un posible resultado, que podrá o no ser modificado si se siguen los advertencias.

En la próxima entrada veremos un ejemplo practicando con esta tirada tan universal.